Tener dos trabajos puede sonar a una cosa terrible. Sin embargo, muchos están estancados en ello. Yo fui uno de ellos, aunque aprendí varias cosas en el proceso. Por lo que no hizo esos 8 largos años que pasaran en vano. Así que presta atención que te voy a compartir cosas que puedes aplicar en tu vida.
Tener dos trabajos me enseñó a valorar mi tiempo libre.
Eran principios del 2013, a unos meses de haber incurrido en una deuda recién llegando a Estados Unidos. Sin mencionar que había perdido el dinero que con un año ahorré. Todo por malas consejos de parte de aquellos que me ayudaron a llegar aquí. Logré conseguir un segundo empleo el cual… Me contrataron a base de mentiras, pero que no pude dejar porque descubrí que no podía contar con nadie más que yo mismo. Por lo que tuve que usar mis habilidades, y mi poco tiempo libre para salir de ese hueco que me habían metido otros.
No digo que no uses algo de ese tiempo libre para disfrutar o hacer algo de ocio, pero debes recordar que si estás estancado en dos trabajos, ten en cuenta que es algo que no debes estar permanentemente. Por lo que debes utilizar lo que tengas disponible para ejecutar una ruta de escape.
Aprendí a trabajar inteligentemente.
Tener dos trabajos a tiempo completo es uno de los métodos más ineficientes para conseguir dinero, y en esos 8 años que estuve no recomiendo a nadie a hacerlo, a menos que no tengas otra opción.
A pesar de que siempre he sido alguien con un pensamiento más lógico o metódico, me obsesioné en crear estrategias para lograr un objetivo en particular. Entre ellos, con el tema de generar ingresos pasivos o ingresos que se pudieran generar sin necesidad de estar presente físicamente para lograrlo. Aunque mis primeros intentos no lograron los espectaculares resultados que quería, aprendí muchas cosas que eventualmente me ayudaron a salir de trabajar por 16 horas todos los días.
El conocimiento es poder, internet te da fuentes casi inagotables de ese poder, y solo depende de ti de darle el uso correcto para salir de ese estado, que va a durar dependiendo de tu situación, lo fiable que sean las fuentes de información, y que tanto trabajes por salir de ello.
Conoces que tan fuerte puedes llegar a ser.
Estuve en muchas ocasiones a punto de quebrarme mentalmente. Cosa que no sucedió, quizás porque en mi mente estuvo eso de “no voy a estar en esta situación para siempre”. Mientras que por ensayo y error probaba cada cosa o estrategia que estuviese a mi alcance para lograr salir de esa situación. Algo que pudo haber destruido a alguien que no fuese mentalmente fuerte.
A pesar de que otros me metieron en esa situación, no les guardo rencor, ya que si no hubiese pasado tales cosas, no habría descubierto lo fuerte mentalmente que puedo llegar a ser. Poniéndolo en términos simples “Uno no sabe que tan fuerte es, hasta que ser fuerte es tu única opción”
Lo que te puedo aconsejar de esta última parte, es que las situaciones fáciles no te harán fuerte. Agradece cuando estén ahí, pero también agradece cada situación complicada que se aparezca en frente. Es una gran oportunidad para crecer hacía una mejor versión de ti.
Agradezco un montón si has llegado hasta aquí. ¿Te interesa este tipo de contenido? Este blog tiene muchas entradas que pueden interesarte. Haciendo clic aquí podrás acceder a mis redes sociales, o en la parte derecha si estas desde una computadora. Seguirme en ellas no cuesta nada, y eso me ayudaría mucho a que otros descubran mi contenido. Nos vemos en una próxima ocasión.